Lo que más me gusta de Los Picapiedra, igual que a muchísima gente, son las máquinas de todo tipo: electrodomésticos, semáforos, aviones, coches… Todo, todo y todo!!!
¡Yabadabadúuu!, Los Picapiedra (The Flintstones) ya con sus primeros 60 años de vida, como el primer programa de dibujos pensado para entretener tanto a un público infantil como a la audiencia adulta. William Hanna y Joseph Barbera, ‘papás’ de esta caricatura, la ambientaron en la Edad de Piedra, las parejas de Pedro y Vilma Picapiedra, y Pablo y Betty Mármol aparecieron por primera vez el 30 de septiembre de 1960 en la cadena ABC de Estados Unidos. La serie original se emitió entre 1960 y 1966, consistía de 166 capítulos y se dividió en seis temporadas.
La serie animada trató de ser una parodia de la vida de las familias de clase media estadounidenses durante la década de los años 1960, con una premisa sencilla que funcionó en varias ocasiones a lo largo del programa: Pedro y Pablo se inventaban una excusa ante sus esposas para salir a jugar al boliche.
Tres años después de su nacimiento, la serie adoptó por primera vez la canción que se convertiría en su seña de identidad, “Meet the Flintstones”.
En piedradura los dinosaurios, los tigres dientes de sable, los mamuts y otros animales hoy extintos coexistían con los humanos, quienes usaban tecnología similar a la del siglo XX, pero en la que los animales sustituían a los aparatos eléctricos los personajes conducían automóviles formados por troncos de madera, troncomóviles, con ruedas de piedra, en donde el motor era sustituido por el empuje de los pies de sus ocupantes, las vestimentas eran de piel animal, la moneda de curso legal era el piedrólar, el reciclador de basura era un animal prehistórico que comía los desechos sin mucho gusto, el cuernófono era el teléfono de la época, etc. Para Joe Barbera, elegir esta época de la historia fue perfecta para el humor visual que pasó a caracterizar al programa, ya que podían tomar cualquier cosa actual y convertirla a la Edad de Piedra, como pinzas de ropa que eran pájaros o aspiradoras que eran pequeños mastodontes.
Los Picapiedras, a pesar de ser un dibujo animado que se supone infantil, trataba temáticas propias de un público adulto: la maternidad (en el caso de los Picapiedras), las siempre complejas relaciones entre suegros y yernos (caso de Pedro con la mamá de Vilma), la ludopatía de Pedro, el consumismo desenfrenado de Vilma y Betty, y el tema más delicado de todos, la infertilidad (en el caso de los Mármol), por la que los Mármol deciden adoptar un niño huérfano (Bam-Bam) al no poder tener uno por sí mismos.
Todos hemos disfrutado de esta serie por sus ocurrencias, sus historias divertidas y por la simpatía de sus personajes, pero ahora hemos querido verla de un modo diferente. Dado que una de las grandes preocupaciones de la sociedad moderna es el daño que nuestra forma de vida está haciendo al medio ambiente, hemos querido ver a la familia picapiedra como una familia muy preocupada por el gasto y por la no contaminación. Es evidente que la historia de esta familia se sitúa en la Edad de Piedra. Pero seguro que repasar su modo de vida nos ayudará a ver dónde podríamos consumir menos o de manera mas racional.
POR DAVID ÁLVAREZ MÉXICO