Venimos estudiando y procesando los conceptos actuales de las tendencias de la moda, el arte y el diseño aplicadas a todo lo que gira a nuestro entorno y que además hacemos parte de nuestro modo de vida.
Para poder comprender esto, necesitamos entender varios conceptos, que tal vez por estar en boga de la actualidad hacemos, pero ni siquiera podemos describir o definir conceptualmente ¿qué es? y solo sabemos que lo hacemos, pero no entendemos por qué o cómo definirlo.
Aquí vamos a tomar en cuenta uno de los principales estilos que debemos conocer para nuestro diario vivir y que nos ayuda bastante a nuestra imagen y desenvolvimiento en nuestro entorno y modo de comunicación. Además de este estilo vamos a encontrar un importante ligamen entre lo que venimos comprendiendo de las tendencias estilísticas del arte, la moda retro, el estilo vintage y ahora, cómo está vinculado a este estilo que se ha denominado como “Chic”. El cual deriva del “chic girl”, que significa chica elegante, sin embargo, vamos a ver que el estilo chic, ha abarcado gran parte de la estética moderna aplicada a todo lo referente al lenguaje visual; tanto así, que pareciera ahora como una regla básica el ser chic o tener un espacio chic.
Debemos recordar que este concepto está haciendo alusión a la elegancia del diseño, ósea que vamos a encontrar en él, una tendencia a aplicar ciertas reglas importantes, como el contraste, la armonía, el orden y la aplicación del lenguaje visual y sus conceptos para poder calificarle dentro de la gama a la cual está haciendo referente.
Observamos que, a la hora de aplicar el estilo chic, vamos a ir integrando varios énfasis a la par que lo va a volver más clasificatorio, porque a esta tendencia le vamos a aplicar el círculo de tendencias que ya habíamos mencionado en el artículo anterior (tradicional, elegante, deportivo, creativo, moderno, étnico, romántico, sexy, autóctono), por tanto, encontramos mezclas como ejemplo romántico chic, moderno chic, y demás. Ahora como parte del cambio y avance en este ámbito nos encontramos con una gama más que agregar a estas tendencias, las cuales son, por ejemplo, estilo minimalista, sporty, pretty, casual, aesthetic. Además de estas tendencias, vamos a integrar en cada uno de ellos las tendencias vintage y retro que ya estudiamos.
Por tanto, siendo así, va a venir tras esto la aplicación de las distintas tendencias artísticas pasadas, lo que nos va a abrir aún más la gama de los estilos chic, ampliándolos a nuevos conceptos y estilos derivados que van a conformar parte de la nueva moda e insisto esto aplica tanto a la vestimenta como los estilos de espacio, diseño y diferentes percepciones de la aplicación del lenguaje visual.
Y por supuesto, esto fomenta ampliamente el mercado, generando más competencia y necesidad de adaptarse al cambio y a la compresión de todo esto, tanto para los productores como para el público consumidor, los cuales ninguno puede quedar rezagado.
Como nuestro trabajo aquí es indagar de donde surge cada concepto, chequemos el pasado para comprender la tendencia de la elegancia y de donde viene en primera instancia la necesidad por lo chic.
Si revisamos la tendencia primaria del estilo, veremos desde siempre que los antiguos que buscan crear desde mobiliario a accesorios con un lenguaje visual cargado y elegante, de materiales refinados que por lo general eran pertinentes a los que eran considerados de la realeza, por lo que siempre los espacios y usos que se le atribuían a lo común debía de contener un alto diseño, aunque primario, pero que no era exento de una belleza singular y de altos valores de diseño y de materiales ricamente tallados, ya fuera mobiliario o accesorios.
Ósea lo chic siempre ha existido, y que lo digan por ejemplo los egipcios o griegos que es en donde vemos piezas altamente pulcras y de diseños exquisitamente elaborados. Pero si nos encaminamos a un contexto un poco más cercano, vemos espacio finamente elaborados y permeados de arte, como la época renacentista, que aun que eran espacios muy recargados siempre mantenían una estética y fineza que además se aludía a un comportamiento similar en las personas que se asociaban con puestos jerárquicos y de alto poder.
Posteriormente bajo el cambio y regresión de las tendencias nos encontramos con el arte conceptual, el minimalismo, que habla de la pulcritud del diseño, los espacios amplios y despejados con arquitectura muy sofisticada elegante, de mucha luz o riqueza estética, lo cual viene a formar parte importante de este concepto de lo chic, ya que fomenta la elegancia por encima de la carga de contenido, de ahí la frase “menos es más”.
Sin embargo, en donde se cae en la tendencia vintage y retro, a lo chic lo que le queda en ese momento es adaptarse, e incorporar estos estos elementos de una manera gradual y de un diseño, muy equilibrado, conteniendo tintes artísticos pero muy pensados. Con un equilibrio visual que evoca a la perfección, lo bonito, elegante y llamativo y si se puede agregar, lo confortable sin salirse de la línea y caer en lo vulgar o casero.
Lo Chic, se volvió exigente y se dio el derecho de comenzar a derivar distintas aplicaciones o estilos para designar nuevas tendencias que contenían características muy específicas que permitían diferenciar y decidir qué nueva tendencia seguir. Ahora encontramos múltiples combinaciones, y lo complejo es decidir cual nos gusta más y en donde calzamos más nuestra personalidad y gustos; pero como dicen por ahí, ¡para gustos, los colores!
Modelo: Fanny Torres MÉXICO
POR LEIRYN ALVARADO ART & DESIGNE COSTA RICA