Actualmente vemos un gran número de tendencias en la moda, que han surgido bajo la influencia del arte, hay que revisar las páginas de la historia, para analizar sus precedentes y darle la apreciación que amerita, ya que es muy fácil apreciar algo, simplemente porque es agradable a los ojos y está bien porque de eso trata el consumo de la moda.
Pero como es importante llevar cada día nuestro conocimiento a una mayor amplitud, cabe rescatar el entender el origen de ciertas tendencias, lo cual contribuye a un mejor manejo de estas, y aun que surgen producto de distintos intereses, es bueno conocer la raíz de su existencia. Esto contribuye a una mayor sensibilización por el arte y a una expresión de la cultura y de nuestro propio conocimiento.
Anteriormente vimos la amalgama que nos genera el arte influenciando fuertemente las tendencias de la moda en distintos ámbitos de su aplicación, llámese espacio, accesorios, medios digitales, entre otras múltiples aplicaciones.
Esas nuevas tendencias de la moda que están siendo fuertemente aplicadas por las generaciones actuales, encuentran su origen en lapsos artísticos como el arte renacentista, la pintura barroca, rococó, el neoclasicismo, el romanticismo, el realismo, el impresionismo, el cubismo, dadaísmo, el arte pop, y entre otras del vanguardismo. Vivimos un alto eclecticismo de las influencias artísticas que se han convertido en aspectos fluctuantes casi efímeros que se quedan por corto tiempo y rápidamente se modifican o renuevan bajo la acelerada velocidad de los cambios de la vida actual, que busca la renovación constante. Tras esa mirada hacia al pasado, se encuentran elementos de estas etapas del arte, que han influenciado fuertemente nuestro entorno actual.
La primera pregunta es el ¿por qué existe esta necesidad de valorar lo pasado, teniendo tanta alternativa futurista que se nos brinda con tan alta tecnología?, y es que hoy esa es la necesidad, contemplar nuestro pasado bajo lupa tecnológica, pero no podemos negar esa extraña nostalgia que encontramos en esos ambientes cargados de arte implícito en nuestro entorno en el mejor de los casos, pero que de alguna manera se ha infiltrado hasta lo más mínimo y sencillo del vivir cotidiano, como por ejemplo el estuche de un móvil.
Chequeemos en un vistazo generalizado las tendencias artísticas que vamos a encontrar en este proceso, para posteriormente en próximos artículos encontrarnos con estas tendencias que vamos a revisar más detenidamente.
Los periodos más destacados como lo mencionamos en el artículo anterior vendrían de la época de los 90`s, 80´s y 70´s, sin embargo, vamos a revisar la influencia del arte renacentista en primera línea, ya que aquí vamos a encontrar aspectos estéticos como lo cargado, lo floral, las volutas, lo romántico que surge de un periodo de fuertes cambios sociales, escapando del oscurantismo.
Este periodo fue un refrescamiento estético que observaba esos entornos románticos, colores suaves, que se convierten en un poema, que con sus transparencias hipnotizan al expectante, se captura lo recargado del espacio con una finalidad estética ricamente utilizada para llenar los vacíos, contrastante totalmente con futuras tendencias que más adelante se aplicaran en este proceso de comunicación plástica.
Introduciéndonos a la era industrial encontramos esa influencia que nos remite al proceso de cambio cultural de las maquinas, del ritmo de la nueva plataforma de vida que nos saca del campo feudal para lanzarse al mundo moderno del cambio y el ritmo acelerado de la vida, de humo de movimiento y de la producción masiva, encontramos una estética distinta que empieza a llevar al público a la practicidad, a ropas de trabajo y entornos cargados, grises y de intereses destinados al consumo, buscando hacer alusión a este contexto que cambia la perspectiva sustancial de la sociedad y nos rememora el interés por el cambio de vida, marcando brechas sociales cada vez más fuertes y distantes.
La época de la producción nos encamina a espacios e interés enfocados en el consumo masivo y esto nos introduce a nuevas tendencias en el arte y el diseño como lo son el cubismo, el impresionismo, cargado de color y líneas, brincando a tendencias como el minimalismo; pasando de un juego entre la necesidad de una totalidad, al extremo de la simplicidad, en este periodo la moda y las tendencias son muy fluctuantes y cambian rápidamente ya que es tanta la producción que crece a pasos muy acelerados y el consumo se dispara fuertemente, en una sociedad altamente consumista; el arte jugaba su papel crítico señalando la afición desmesurada por las cosas banales y así mismo en el mundo, el contexto y comportamiento humano.
Estética y conceptualmente vemos surgir un lenguaje plástico, donde la forma es simplificada, queriendo huir de lo recargado de la época anterior y dando paso a una nueva mentalidad social de lo simplista, de minimizar nuestro entorno, sin embargo, esta tendencia abre camino a una nueva exigencia social vinculada a lo estéticamente costoso, el concebir menos, era el ideal pero traducido a elementos que se convertían en espacios refinados por su materialidad o accesorios simplistas en diseño, pero de precios muy altos; las alfombras de la moda tienen un empuje fuertísimo con toda esta nueva alternativa del diseño y el consumo por el diseño se vuelve exacerbado, y muchas esferas sociales quedan fuera de este alcance estético, por lo cual se dan los productos de bajas o medias calidades para permitir la compra de algo similar, encontramos aquí las compras de copias de productores de diseño y de arte de gran renombre, excluyendo a muchos del alcance del diseño, el arte y la moda, reservándose por un largo tiempo solo para algunos.
POR LEIRYN ALVARADO ART&DESIGNE COSTA RICA ARTÍCULO EDICIÓN DIGITAL FEBRERO 2024